La inyección de gas ha originado unos 250 seísmos frente a las costas de Castellón
Un terremoto de 3,9 grados en la escala de Richter, el mayor de los más de 250 micro-seísmos producidos hasta ahora por el proyecto Castor, se registró la pasada madrugada sin causar daños frente a la costa del norte de Castellón y sur de Tarragona.
Según datos del Instituto Geológico de Cataluña, el seísmo se produjo a las 4.21 minutos a una profundidad de 5 kilómetros frente a la costa de Vinaroz y, aunque fue percibido por algunos ciudadanos en Sant Carles de la Rápita, en la provincia de Tarragona, no causó daños.
A 1.750 metros de profundidad
El proyecto Castor, con una inversión de 1.200 millones de euros, trata de aprovechar un antiguo pozo petrolífero a 1.750 metros de profundidad bajo el nivel del mar para suministrar hasta un tercio de la demanda de gas del sistema durante 50 días, pero, al parecer, la inyección de gas está provocando desde el pasado 13 de septiembre numerosos micro-terremotos, que hasta ahora no habían superado los 3,6 grados de magnitud.
De hecho, según el Instituto Geológico de Cataluña, el domingo también se produjo un seísmo de 3,6 grados, la misma magnitud del que se originó el pasado 23 de septiembre, mientras que el resto de los temblores no han superado los 3 grados.
A raíz de estos micro terremotos, el Ministerio de Industria, Energía y Turismo ordenó la pasada semana el cese temporal de la actividad en el almacenamiento subterráneo de gas natural Castor, situado en el mar frente a la costa de Vinaroz, mientras recaba información sobre la actividad sísmica detectada en la zona.
Pese a la orden ministerial, la empresa Escal UGS, que gestiona el proyecto, ha afirmado que la planta sigue funcionando con normalidad aunque sin extracción de gas, algo que pretende retomar este mes de octubre.